Esté en guardia cuando compre en línea

Ahhh, la Internet. ¡Que invento! No es ningún secreto que el navegar y comprar en línea puede ahorrarle tiempo, dinero y esfuerzo. La Comisión Federal de Comercio (FTC) frecuentemente recomienda que usted se detenga y piense antes de hacer clic, esto con el fin de impedirle que los ladrones cibernéticos interfieran con sus compras y finalmente, con el gozo en los días festivos.

La FTC y la industria de alta tecnología, recientemente lanzaron OnguardOnline (en línea, en guardia), una campaña para ayudar a los consumidores a practicar la seguridad en su rutina diaria al navegar en línea. El tomar ciertas precauciones cuando se está en línea puede ayudarle a minimizar los contratiempos. Entre muchas otras sugerencias por parte de la www.OnGuardOnline.gov están:

  • Sepa con quien está interactuando. Cualquiera puede crear una tienda en línea. Confirme la dirección física y el número de teléfono del vendedor en línea, esto en caso de que usted necesite contactarse con ellos. Si usted recibe un correo electrónico o mensaje automático del vendedor, mientras usted está navegando en su página, el cual le solicita su información financiera, no conteste o haga clic en la dirección de enlace (link) del mensaje. Recuerde, las compañías legítimas no piden esta información vía correo electrónico o mensajes emergentes (Pop-ups).
  • Lea entre las líneas. Lea las descripciones del vendedor o del producto, sobre todo si la letra es pequeña. Palabras tales como “restaurado” (refurbished), “vendimia” (vintage), o “venta de liquidación” (close-out) pueden indicar que el producto no está en buenas condiciones. Los artículos de marca que se ofrecen a precios “demasiados baratos para ser verdad” podrían ser falsas imitaciones.
  • Calcule los costos. Verifique con aquellos sitios de Internet que ofrecen la comparación de precios y coteje “manzanas con manzanas”. Así mismo; considere los costos por manejo y envío sobre el costo total de la orden. Entonces, analice dichos costos y compárelos con su presupuesto y necesidades.
  • Pague usando crédito o tarjetas de crédito. No envíe dinero en efectivo bajo ninguna circunstancia. Si usted usa crédito o una tarjeta de crédito al pagar en línea, su transacción está protegida por el Acto Justo de Facturación de Crédito. Bajo esta ley, usted tiene el derecho de disputar los cargos bajo ciertas circunstancias y temporalmente detener el pago mientras el acreedor es investigado. En el caso de que su crédito o tarjeta de crédito fue usada sin su consentimiento, usted generalmente es responsable de no más de $50 en cargos hechos en la tarjeta. La mayoría de las compañías no responsabilizan a los consumidores por cargos no autorizados hechos en línea; de igual forma; algunos emisores de tarjetas de crédito, proporcionan garantía adicional, reembolso y/o beneficios de protección para compras fraudulentas.
  • Revise los términos del contrato, tales como las políticas de reembolso y/o fechas de entrega. ¿Puede usted devolver el artículo por el reembolso total de su dinero? ¿Si lo devuelve, quién paga los costos del envío o las cuotas de re-almacenamiento? Verifique cuando es que usted recibiría su orden. La ley exige a los vendedores que ellos envíen los artículos en un promedio de 30 días después de la fecha de la orden, esto si es que no se prometió fecha alguna. ¿Puede el destinatario devolver el paquete/regalo? Si ese es el caso, pregunte si el recibo de regalo debe ser incluido en el paquete.
  • Guarde sus comprobantes. Imprima y guarde pruebas de sus transacciones en línea, incluso la descripción del producto y precio, el recibo en línea y copias de cualquier correo electrónico que usted haya intercambiado con el vendedor. Lea sus estados de cuenta de la tarjeta de crédito tan pronto los reciba, esto para estar al pendiente de cargos no autorizados.
  • No mande su información financiera a través de correo electrónico. El correo electrónico no es un método seguro para transmitir información financiera o personal, tales como su número de tarjeta de crédito cuenta bancaria o número de Seguro social. Si usted comenzó una transacción y quiere proporcionar su información financiera a través del sitio de dicha organización, revise si los indicadores del sitio son seguros, tales como el icono en forma de candado en la barra de estatus del navegador o en el URL para sitios en los cuales su dirección comienza con “https: ” (la “s” significa “seguro”). Desgraciadamente, ningún indicador es seguro; algunos sitios fraudulentos ya muestran dicho icono de seguridad. Use software antivirus, cortafuego (firewall) y actualícelos regularmente.
  • El software antivirus protege su computadora de virus que pueden destruir su base de datos, disminuir la velocidad del computador, descomponerlo e incluso, permite a los “spammers” (sitios que roban y distribuyen dirección de correo electrónicos) enviar “correos basura” a su cuenta. Escanee su computadora y la bandeja de entrada de su correo electrónico para detectar virus y eliminarlos. Su software antivirus debe actualizarse rutinariamente con los antídotos para los últimos “bugs” (es el resultado de una falla de programación introducida en el proceso de creación de programas de computadoras) que circulan a través de la Internet. Los cortafuegos ayudan para que los “hackers” (ladrones cibernéticos) no usen su computador para transmitir su información personal sin su permiso. Imagine que su cortafuego es como un guardia, el cual vigila los esfuerzos hechos por externos para ingresar a su sistema y bloquea las comunicaciones de y hacia fuentes, las cuales usted no ha autorizado. Si su sistema operativo no incluye un cortafuego, consiga uno que se venda por separado o instale un hardware cortafuego—dispositivo externo que incluye el software cortafuego.
  • Revise la política de privacidad de la compañía antes de hacer negocio con ellos. Esto le permitirá saber que tipo de información personal están colectando los operadores del sitio; así como el por qué y cómo ellos van a usarla. Si usted no puede encontrar la política de privacidad o no la puede entender—considere hacer negocio con otro sitio que esté más conciente de la seguridad del cliente.