Convirtiéndose en un estudiante no tradicional -

Si usted no ha asistido a la escuela desde la salida de la escuela secundaria, probablemente usted ha sido aconsejado muchas veces por amigos y familiares bien intencionados, de que una manera de mejorar su estabilidad financiera es obtener una educación superior. Ciertamente hemos mencionado en nuestras publicaciones de FFEF. Y es probable que usted haya dado algunas ideas de vez en cuando a continuar su educación. Porque el decidir regresar o no a la escuela puede ser una decisión estresante por hacer y porque el pensar en volver a la escuela puede resultar desalentador, esta edición de la carta informativa de FFEF está dedicada a despejarle el camino y ofrecerle un poco de reflexión.

Es probable que, si decidió regresar a la escuela, usted estaría siendo como un estudiante “no tradicional”. ¿Exactamente qué es un estudiante “no tradicional”? El término no es exacto y por lo general incluye un grupo mucho más amplio de lo que muchos de nosotros pensamos. La mayoría de las personas relacionan el término con la edad, es decir, estudiantes que son mayores de 25 años. Aunque la edad sea una de las características de la definición, el estado de dependencia financiera, situación familiar y el estado de graduación de la escuela secundaria también son considerados. Muchos colegios ofrecen hoy la información expresamente para estudiantes no tradicionales y parece haber un consenso general entre estos colegios que los estudiantes no tradicionales tienen una o varias de las siguientes características:

No entran a educación superior en el mismo año civil en que completa la escuela secundaria.
Asiste a la escuela en tiempo parcial al menos durante parte del año escolar.
Trabaja a tiempo completo (35 horas o más por semana) mientras está matriculado.
Ya no depende de los padres para ayuda financiera.
Tiene uno o más hijos y es madre/padre soltera (o).
No cuenta con un diploma de escuela secundaria.

Usted puede sorprenderse al enterarse de que un gran número de adultos están tomando la decisión para avanzar en su educación. Si usted tuviera que entrar hoy en un curso de colegio, descubriría que muchos de sus compañeros de estudios son adultos. De hecho, la población de los colegios y estudiantes universitarios mayores de 25 años se encuentra en un máximo histórico con las estimaciones de que el grupo de estudiantes no tradicionales constituyen entre el 40% al 50% de todos los estudiantes. Este gran número de estudiantes adultos que entran o regresan a la universidad ha dado lugar a que muchas universidades ofrezcan servicios de apoyo dirigidos específicamente a estudiantes no tradicionales.

Muchos adultos se sienten intimidados acerca de regresar a la universidad porque creen que la universidad es sólo para los jóvenes o se pueden sentir muy lejos de la escuela. Si tiene sentimientos de aprensión, por favor tenga en cuenta que la universidad es para cualquier persona que quiera aprender. Muchos profesores prefieren enseñar a estudiantes adultos, ya que los adultos traen la experiencia del mundo real al aula y a menudo tienen más motivación y el deseo de aprender que los estudiantes más jóvenes.

Pagando por la escuela

Una vez que ha decidido que el regresar a la escuela sería una buena idea para usted, la gran pregunta se convierte en “¿Cómo voy a pagar por ella?” No se desanime. Hay muchas opciones a considerar. Es posible incluso obtener más, si no es que todo, para pagar por su educación a través de subsidios y becas. Muchas becas se basan en la necesidad más que en el logro académico.

Y hay muchos servicios que ofrecen actualmente las universidades que ayudan a aliviar la carga financiera. Aquí están algunas ideas para investigar:

Solicite ayuda financiera a través de una solicitud gratuita de ayuda federal para estudiantes (FAFSA). La Ayuda financiera federal está disponible en forma de subsidios, préstamos y programas de trabajo para los estudiantes. Si usted está pensando en volver a la escuela, solicite ayuda financiera a través del gobierno federal, tan pronto como sea posible, de preferencia en enero del año en el que va a comenzar las clases.
Sólo por el hecho de que usted aplica no significa que tiene que aceptar la ayuda. Pero usted puede encontrar que le concedan un subsidio que cubra todos sus gastos de educación o al menos la mayoría de ellos. El gobierno federal está interesado en ayudar a las personas a mejorar su estabilidad financiera. Esto es bueno para la economía. Esto debería ser una de las primeras opciones a investigar. El formulario es largo y llevará tiempo para completarlo, pero podría ser la diferencia entre poder ir o no a la escuela.
Existen numerosos programas de ayuda financiera y becas específicamente para estudiantes adultos. Usted puede descubrir que los clubs y organizaciones ofrecen becas a estudiantes adultos. Muchos adultos no saben acerca de estas becas y por lo tanto, no aplican, lo que a veces hace que sea más fácil obtener una. Si no investiga sus opciones de ayuda financiera, usted está dejando pasar dinero gratuito que podría ayudarle a obtener una educación. Puede buscar por becas disponibles en línea en CollegeBoard.com y Fastweb.com.
Muchos empleadores ofrecen programas de reembolso de matrícula. Su empleador podría ser uno de ellos. Estos programas por lo general requieren que usted trabaje para obtener un título o certificado relacionado con su trabajo actual. Pero si le gusta lo que usted hace y sólo quiere la oportunidad de progresar, esto puede ser la solución perfecta. Usted tendrá que pagar la matrícula por adelantado y luego su empleador le reembolsará cuando haya completado el curso y recibido un título aprobado. Pero usted puede pagar semestre por semestre después de haber pagado por el primer semestre y haya sido reembolsado, puede utilizar ese dinero para pagar el segundo semestre y así sucesivamente hasta después de su último semestre, el reembolso cubrirá lo que pagó por el primer semestre.
Oportunidades de trabajo están disponibles en el Campus para estudiantes adultos. Verifique con las instituciones financieras de ayuda y oficinas de colocación por las oportunidades de trabajo. Estas oportunidades no sólo le pagan un salario, sino también reducen sus honorarios de matrícula casi tanto como la mitad.

Ellos también le ahorran tiempo y dinero en el desplazamiento. A menudo, los asesores específicos, consejeros de ayuda financiera, coordinadores de programas de apoyo y servicios especiales se prestan a trabajar con los estudiantes no tradicionales.

Pregunte a la escuela por la ayuda que ellos tienen disponible y en la que usted está interesado. Estos servicios ayudan a estudiantes no tradicionales con la disponibilidad de programas de becas, matrículas, asesoría, consejería, elecciones de carrera, servicios médicos, estacionamiento, ayuda financiera, hospedaje, conmutando problemas y preguntas acerca de los cursos, programas e instructores. Suelen estar también disponibles publicaciones que explican los servicios.

El servicio de guardería es proporcionado para los niños de estudiantes en muchos campus universitarios a un precio razonable. Además, algunos campus con instalaciones de guardería los aceptan sin previo aviso en caso de una emergencia. Vea lo que tiene disponible la escuela en la que usted está interesado.
Los grupos de apoyo para estudiantes adultos se están volviendo más comunes en los campus. Estos grupos son importantes no sólo para hacer amistades y aumentar contactos, esto reduce la sensación de que está sólo, sino también porque los participantes comparten información valiosa que le puede ahorrar tiempo y dinero. Casi todos los colegios ahora ofrecen programas flexibles con clases, una noche a la semana en vez de dos o tres. Muchos ofrecen cursos sólo los fines de semana, programas acelerados, aprendizaje a distancia, programas en línea, cursos por correspondencia y planes creativos de educación para estudiantes no tradicionales.
La asistencia académica puede estar disponible a bajo costo o sin costo alguno. Usted podría descubrir que califica para tutoría gratuita. A menudo los laboratorios de escritura, lectura, computación y de matemáticas están disponibles para asistirle.
Los colegios en ciudades que tienen un área geográfica más grande, están creando extensiones del campus en todas partes del área. Algunos tienen tantos como cinco o seis campus satélite. Esto hace que sea más fácil para los estudiantes que viven a cierta distancia del campus principal de asistir a clases sin los gastos de una conmuta.

Subsidios gubernamentales gratis: No se deje engañar

Tenga cuidado de anuncios afirmando que usted puede calificar para recibir “un subsidio gratis” para pagar por gastos de educación, reparaciones del hogar, gastos profesionales de la casa o facturas sin pagar. Incluso podría ser una llamada de teléfono supuestamente de una agencia de “gobierno” o algún otro organismo oficial con un nombre reconocido. En cualquier caso, la afirmación es la misma: su solicitud de subsidio está garantizada para ser aceptada y nunca tendrá que pagar el dinero.

La Cámara Federal de Comercio (FTC) advierte que “el dinero fácil” por ofertas de subsidios generalmente son estafas, quiera o no, los ve en su periódico local, una revista nacional o escucha sobre ellos en el teléfono. Ellos alegan legitimidad y usan nombres oficiales reconocidos como el nombre de “Administración Federal de Becas.” Es posible que le hagan algunas preguntas básicas para determinar si usted “califica” para recibir un subsidio. A continuación, le pedirán su información bancaria para que el dinero pueda ser depositado en su cuenta.

De hecho, nunca vera el subsidio que prometen. En cambio, van a desaparecer con su dinero. La FTC dice que siguiendo estas reglas básicas pueden ayudarle a prevenir la pérdida de dinero por estafas de “subsidios gubernamentales”:

No dé información de su cuenta bancaria a alguien que usted no conoce. Los estafadores presionan a la gente a divulgar la información de su cuenta bancaria a fin de que puedan robar el dinero de la cuenta. Siempre guarde su información confidencial de su cuenta bancaria. No la comparta a menos que esté familiarizado con la empresa y sepa por qué es necesaria la información.
pague ningún dinero por una beca “gratis” del gobierno. Si usted tiene que pagar dinero para solicitar una beca “gratis” del gobierno, esto no es realmente “gratis”. Una verdadera agencia de gobierno no le pedirá pagar un cargo de procesamiento de una beca que ya le han concedido— o pagar por una lista de instituciones que ofrecen becas. Los nombres de agencias y fundaciones que conceden becas están disponibles gratis en cualquier biblioteca pública o en el Internet. El único punto de acceso oficial para todas las agencias federales que ofrecen becas es www.grants.gov.
Tenga cuidado de nombres oficiales que suenan parecidos. Sólo porque la persona que llama dice que es de la “Administración Federal de Becas” no significa que así sea. No existe tal agencia gubernamental. Lamentablemente, muchas compañías incluyen la palabra “federal” en su título de compañía para añadir credibilidad a su compañía. Se hace más y más difícil de distinguir entre lo que es realmente una agencia del gobierno federal y lo que es sólo un acercamiento de mercadotecnia inteligente.

Tome un momento para comprobar las páginas azules de su directorio telefónico para determinar si una empresa es una agencia de gobierno legítima.

Si usted piensa que pudo haber sido víctima de una estafa de becas, presente una queja con la FTC en línea en www.ftc.gov, o llame sin cargo al, 1-877-FTC-HELP (1-877-382-4357); TTY: 1-866-653-4261. La FTC ingresa las quejas presentadas por los consumidores a una base de datos segura y herramienta investigativa llamada Red Centinela del Consumidor (Consumer Sentinel) que es utilizada por cientos de agencias de cumplimiento de las leyes civiles y penales en los Estados Unidos y del extranjero.

Fábricas de diplomas: No se deje engañar

¿Ha recibido alguna vez un correo electrónico o ha visto un anuncio que afirma que usted puede ganar un título universitario basado en su experiencia de vida? La Comisión Federal de Comercio (FTC) dice que no se deje tentar. Ese correo electrónico o anuncio es lo que comúnmente se le llama una “fábrica de diplomas”. Las fabricas de diplomas son empresas que ofrecen títulos o certificados por un pago monetario que es menor al costo de la matrícula universitaria. Por lo general, requieren poco o ningún trabajo de clase, el cual puede ser muy tentador cuando se es madre soltera o se encuentra bajo tensión financiera. Sus llamados títulos se otorgan únicamente en base a la experiencia de vida.

El problema es que los empleadores y las instituciones educativas consideran que está mintiendo si pretende obtener un título que no ganó realmente a través de la universidad o un curso de trabajo en una escuela de enseñanza técnica. La FTC advierte contra este tipo de comportamientos riesgosos. Si utiliza el llamado “Titulo” de una fábrica de diplomas para afirmar que está calificado para un determinado puesto de trabajo o de promoción, usted corre el riesgo de no ser contratado, de ser despedido y en algunos casos a ser demandado. La última cosa que usted quiere hacer es gastar dinero por un título que realmente pone en peligro su progreso en lugar de ayudar.

Las fábricas de diplomas pueden decir que están “acreditadas”

Los colegios y universidades se someten a un riguroso examen de calidad de sus programas educativos antes de ser acreditados por organizaciones legítimas. Si una escuela está acreditada, usted sabe que la educación que ofrece es de un nivel aceptable. Muchas fábricas de diplomas afirman estar “acreditadas”, pero su acreditación es de una agencia oficial de sondeo que han creado ellos mismos. Antes de aceptar cualquier afirmación de la acreditación, compruebe por usted mismo para ver si la escuela está reconocida por una organización legítima en la base de datos de instituciones académicas acreditadas, enviadas por el Departamento de Educación de Estados Unidos en www.ope.ed.gov/acreditación o en la base de datos del Consejo de Acreditación de Educación Superior en www.chea.org/búsqueda.

Tenga cuidado con los nombres que suenan parecidos

Algunas fábricas de diplomas dan nombres que son muy similares a los colegios o universidades con renombre. Las hacen parecer como legítimas. Incluso si una “escuela” tiene una dirección Web “.edu” (por ejemplo, www.utah.edu), esto no garantiza que es legítimo. Algunas fábricas de diplomas utilizan nombres extranjeros que pueden sonar creíbles. Esto puede hacer más difícil la investigación de su legitimidad, pero vale la pena el tiempo invertido. Si se le está haciendo difícil verificar una institución de enseñanza en particular, llame al encargado de registros de una escuela o universidad local y pregúntele si aceptarían la transferencia de créditos de la escuela que está considerando. Si lo hacen, usted sabe que la escuela que está investigando es legítima.

Señales para identificar el cuento de los “fabricantes de diplomas”:

No hay clases o exámenes-obtenga un título sobre la base de su experiencia. “Los fabricantes de diplomas” otorgan títulos solamente sobre la base de la experiencia laboral o de vida. Es posible que las instituciones de enseñanza acreditadas otorguen algunos pocos créditos por la experiencia específica pertinente a un programa de graduados, pero no por un diploma completo.
Sin concurrir a clases. Las universidades legítimas, incluyendo las que operan en línea, requieren una cantidad sustancial de tiempo dedicado a cursar estudios.
Cuota fija. Muchos “fabricantes de diplomas” cobran por título o diploma. Las instituciones educativas legítimas cobran por crédito, curso o semestre y no un cargo fijo por un título completo.
Sin espera. Si un anuncio promete que usted puede obtener un título rápidamente, probablemente es una fábrica de diplomas. Obtener una educación lleva tiempo.
¡Haga clic ahora y solicítelo ya! Algunos “fabricantes de diplomas” se imponen a fuerza de tácticas de ventas agresivas. Las instituciones de enseñanza acreditadas no utilizan el correo electrónico no solicitado (spam) ni efectúan llamadas de tele mercadeo de alta presión para promocionarse.