Como padres, generalmente nos resistimos a que otras personas nos digan como criar a nuestros hijos. Pero cuando se trata de enseñarles como manejar el dinero sabiamente, la mayoría de nosotros buscamos toda la ayuda posible.
El hecho es que muchos adultos y adolescentes no entienden los conceptos más básicos sobre el manejo del dinero. Por otro lado, los jóvenes regularmente acuden a sus padres para obtener guía y educación financiera. Para ayudar a los hijos a aprender las habilidades del manejo de dinero, los padres primero deben evaluar su propio manejo de las finanzas personales, así mismo ganar la confianza necesaria para hablar con sus hijos sobre el tema del dinero.
De acuerdo al Departamento de Instituciones Financieras de Indiana, hoy día los niños y adolescentes tienen más dinero para gastar que generaciones anteriores, así mismo; desarrollan modelos de gasto a una edad muy temprana. Las actitudes de los hijos sobre el dinero, en muchos de los casos se ven influenciadas por los padres, los medios de comunicación, sus amigos y sus propios éxitos y/o fracasos gastando su dinero. Sus habilidades al manejar el dinero se desarrollarán de las ideas, actitudes y hábitos de gasto que aprendan en casa, en la escuela y en el supermercado. Aquellos que aprenden las habilidades del manejo de dinero, muy probablemente se convertirán en adultos capaces de tomar decisiones financieras sabias, evitando la deuda excesiva y manejando sus ingresos y gastos de tal manera que puedan alcanzar sus metas financieras. Los padres pueden ayudar a los hijos enseñándoles las habilidades del manejo de dinero a una edad temprana, esto con el fin de que se conviertan en buenos administradores y consumidores responsables. La educación financiera debe ser basada en las necesidades, intereses y habilidades de cada niño. Las siguientes pautas pueden ser de gran utilidad para los padres:
Menores de 5 años
Considere el hablar con sus hijos sobre el dinero cuando ellos alcancen la edad de 3 años. Use una alcancía para enseñarles como identificar y contar las monedas o dinero en efectivo. Entre las edades de 4 y 5, explíqueles la importancia del buen hábito del ahorro. Ayúdeles a entender que seria de gran satisfacción el primero poder ahorrar, para después comprar el artículo tan anhelado.
Lleve a su hijo a la tienda para que revise aquel juguete que miró en el anuncio. Juntos examinen el juguete y decidan si realmente puede mantener las promesas hechas en el comercial. Los niños a esta edad están bastante conscientes de los anuncios de televisión y a menudo hasta recitan las canciones que oyen. Empiece hablándoles sobre la realidad financiera de la familia y de como es que se toman las decisiones.
De 5 a 10 años
Esta es la edad apropiada para comenzar a darles su “Domingo” (dinero del presupuesto asignado para los hijos) y abrir una cuenta de ahorros. Usted puede enseñarles a planear el uso de su dinero, ya sea de sus domingos o del dinero en efectivo que hayan recibido como regalo. Usted también puede sugerirles que se ganen dinero extra haciendo pequeños trabajos en casa. Cuando los niños comiencen a gastar dinero, ayúdeles a analizar sus decisiones. Ellos aprenderán que existen consecuencias cuando uno toma malas decisiones y la importancia de priorizar necesidades y deseos.
De 11 a 14 años
Cuando los hijos entran en la adolescencia, ellos están preocupados por lo que sus amigos están haciendo y están comprando. Por consiguiente, ellos tienden a adoptar los modelos de gasto de sus amigos. Este es un buen momento para demostrarles la importancia de la comparación de precios, sobretodo cuando usted compra víveres o servicios. Durante esta edad, muchos adolescentes encuentran trabajos cuidando niños, cortando césped o removiendo nieve. Ellos pueden ahorrar ese dinero o gastarlo en ropa, accesorios y discos compactos. Es importante que ellos tengan el control de su dinero, ya que sus éxitos o fracasos financieros se convertirán en valiosas experiencias de aprendizaje.
De 15 a 18 años
Estos son los años más difíciles, es cuando los adolescentes están intentando ser financieramente independientes, pero aún dependen de los padres. Este es el mejor momento para discutir seriamente el ahorro, esto con el fin de alcanzar metas a largo plazo, tales como la universidad o un automóvil. Para poder lograr estas metas, muchos adolescentes obtienes trabajos de medio tiempo, tales como en restaurantes de comida rápida, tiendas departamentales y otros diferentes establecimientos. Durante su último año de bachillerato, algunos estudiantes obtienen cuentas de cheques o una tarjeta de crédito para ser usada en la universidad.
¿Entonces, que es lo qué usted debe hacer si no le gusta la manera en que su hijo adolescente maneja el dinero? De acuerdo a la Extensión Cooperativa de la Universidad de New Hampshire, las impresiones sobre el dinero se forman a una edad muy temprana, por lo tanto, si usted está preocupado por los hábitos del manejo de dinero de su hijo adolescente, usted necesita considerar el historial de su hijo con referencia al dinero, esto con el fin de buscar pistas. El dinero a menudo juega un papel fundamental en nuestra autoconcepción, autoestima y sentido de inteligencia. Considere que emociones podrían estar motivando las decisiones del manejo de dinero de su hijo.
Nuestros valores personales (lo que es más importante en nuestra vida) es lo que influye en nuestras decisiones financieras. Los valores personales son los estándares o cualidades considerados importantes o deseables y los cuales justifican nuestras conductas, acciones o metas. Nosotros expresamos nuestros valores, en parte por la manera en que nosotros escogemos gastar o ahorrar nuestro dinero. Usted puede exhortar a sus hijos para que aprendan las bases del buen manejo de dinero, ya sea ahorrando, invirtiendo, donando, gastando, ganando y presupuestando; lo cual reflejará los valores que gobiernen en su familia.
¿Debo darles a mis hijos su domingo?
Pagar o no pagar a sus hijos su “Domingo”, ésa es la pregunta. No todos los padres piensan lo mismo y claro, la decisión es suya. Muchos padres sienten que darles su “domingo” representa una gran oportunidad para que los hijos aprendan a manejar el dinero a través de la práctica y experiencia. Es dinero real que los hijos pueden manejar. El dinero de los “domingos” debe comenzar a dárseles cuando los niños pueden identificar las monedas, sepan como contarlas y tengan la oportunidad de gastar. Esto regularmente ocurre alrededor de los 5 o 6 años de edad. Si usted decide darles su “domingo”, recuerde que independientemente participen o no en los quehaceres de la casa, es importante dárselos en intervalos regulares y proporcionar una guía muy general de como gastar y ahorrarlo. Deles suficiente libertad de tomar sus propias decisiones.
Permita que sus hijos traigan su “domingo” consigo cuando usted vaya al supermercado. Es entonces que ellos tendrán que decidir si en verdad desean ese refresco, chocolate, chicle o la barra de caramelo como para gastar su “domingo” en ello. Si usted no quiere darles su “domingo”, permítales manejar el dinero dándoles la oportunidad de pagar al cajero del supermercado o al encargado del estacionamiento.
Les de “domingo” o no a sus hijos, siempre habrá discusiones y negociaciones acerca de las compras. Ayude a sus niños a aprender a distinguir entre las necesidades y los deseos. Así mismo; si usted como padre establece lo que es su responsabilidad pagar y lo que los hijos deberán pagar, podrían reducirse la tensión y por ende las discusiones. Pongamos un ejemplo: digamos que su hijo quiere un par de zapatos de $80 y usted sólo puede darse el lujo de pagar $40. Usted podría poner los $40 y su hijo podría poner el resto. Una vez se ha definido “quien paga que”, sea consistente. Se asombrará que tan rápidamente el “debo tener ese artículo” disminuye en importancia cuando los hijos saben que es su dinero el que ellos tendrán que gastar.